PSIQUE&SALUD
Programa
Manualidades y Arte para la Autoafirmación
TARDES
DE MANUALIDADES Y CAFÉ
5 de
junio de 2015
Flexibilidad para Amar
Por
María Antonieta Campos Badilla
Filipenses 4:5 y 8 dice:
Vuestra gentileza sea conocida de todos los hombres… Por lo
demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo
lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna,
si algo digno de alabanza, en esto pensad.
Por qué cuesta tanto ser gentil? ¿Por
qué algunas veces molestan tanto las actitudes o conductas de otros?, o ¿por
qué sentimos la necesidad de decirle a los otros cómo vivir su vida?
Nuestra sociedad nos enseña a
pensar en lo justo pero de forma parcializada, sin pensar en verdades completas,
sin ser capaces de ponernos en los zapatos de otros ni de ver el mundo como
ellos lo ven. Pensamos en ser honestos y decir nuestras verdades parciales como
si fueran absolutas, con absoluta honestidad. ¿Quién nos hizo maestros? ¿Acaso
no es Jesús el maestro?
Y para quienes nos decimos sus discípulos,
¿por qué se atiende esta enseñanza de manera parcial: Pensamos en nuestras verdades,
en nuestra honestidad y en nuestra justicia, sin dedicarnos con esmero a pensar
en lo que es puro, en lo que es amable, en lo que es de buen nombre, en aquello
que tiene virtudes hermosas, en aquello que se puede alabar.
Si realmente estuviéramos
pensando en todo esto, de nuestra boca brotaría gentileza para el que tenemos a
la par. ¡Siempre gentileza! Nuestra mente estaría acostumbrada a identificar
las virtudes y las acciones dignas de alabanza de los demás; encontraríamos
aquello que es bueno y lo resaltaríamos constantemente sin pensar.
Cuando hablamos, la semana pasada
sobre el mar, y sobre cómo este cubre de corales hermosos los barcos hundidos
en su profundidad; estábamos hablando justamente de eso; de ser suficientemente
flexibles para hacer brotar hermosura del caos.
Hicimos un ejercicio en el grupo
de manualidades, cubrimos botellas de plástico viejas, con papel, cintas y
lentejuelas, y decidimos utilizarlas con propósitos alegres de fiesta en
nuestro hogar. Decidimos no desechar sino adornar y reutilizar. Antes de eso
habíamos hecho otra manualidad, tomamos pequeños pedazos de tela y cortamos
hexágonos, hicimos piezas pequeñas de patchwork, y las pegamos con gracia sobre
manteles o cubrecamas. Lo ordinario lo convertimos en extraordinario.
Creaciones manuales personalizadas que nadie dudaría en elogiar.
¿Y por qué no adornar nuestra vida con la misma
gentileza de pensamientos y palabras para los demás? ¿Por qué no
dedicarnos a amar y no a juzgar? Ser
personas críticas y pensantes significa ver la realidad completa, y rescatar
todo lo bueno que se pueda rescatar para
construir un mundo hermoso.
¡Flexibilidad! Ese es nuestro
tema. Flexibilidad para ver la vida desde sus muchas perspectivas y para
decidir no juzgarla, sino amarla. Flexibilidad para amar a quien es, piensa y
actúa diferente a nosotros. Flexibilidad para entender que el barco que hay que
cubrir con hermosura somos nosotros mismos.
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